Esta suspensión de escaso volumen es la adecuada para el aislamiento de tuberías de escape de motores y de grupos electrógenos embarcados o estacionarios. Inalterable a los agentes agresivos, aceites, grasas, corrosión, resiste a temperaturas extremas de – 70°C a + 500°C.
La frecuencia propia comprendida entre 15 y 20 Hz permite un desacoplamiento del punto de fijación del soporte de tubería y mejora así los niveles acústicos y la libre dilatación de las tuberías.